Si eres de las personas que ha tomado la decisión de comenzar tu propio negocio, pero en el camino te has visto estancado o no has tenido los resultados que esperabas, déjame decirte que estás en el camino correcto.
Muchas personas creen que emprender es algo que solo necesita determinación y en parte tienen razón, pero una cosa es emprender, pero que tu emprendimiento tenga éxito es algo bien distinto.
He emprendido varias veces en mi vida, tanto negocios digitales como negocios locales y debo decir que he perdido pero también he ganado.
Hacer que tu emprendimiento tenga éxito, exige esfuerzo y trabajo continuo. Requiere mucha dedicación.
Pero algo que debes tener claro en este proceso como emprendedor es que al iniciar tu empresa vas a notar perdidas en tu negocio. Así es perdidas.
El proceso de emprender
Cuando se es empleado se tiene una fuente de ingresos relativamente fija con la cual puedes contar mes a mes, pero estás sujeto a las condiciones de la empresa en la que laboras y a la actitud de tus jefes.
Está ultima es probablemente la principal razón por la que las personas deciden emprender. Porque no quieren que los manden o quieren ser sus propios jefes.
Esto resulta interesante y es la principal razón del por qué la mayoría de los emprendimientos fracasan en el primer año.
Para emprender con éxito necesitas es clave tener una buena razón y una gran motivación.
Es decir, necesitas realmente confiar en que tu proyecto tendrá éxito y estás dispuesto a trabajar día y noche para cumplir esa meta.
Para mí resulta muy curioso que las personas que se encuentran en grupos de facebook o en las búsquedas de google, dirigen su mirada en cómo ganar dinero fácil.
Las personas están interesadas en ganar mucho dinero, con muy poco esfuerzo y esto resulta muy difícil si lo que quieres es emprender.
Me gusta dividir el proceso de emprendimiento en estas 4 fases:
- Concepción
- Acción
- Cohesión
- Expansión
Concepción
En esta fase surge la idea de emprendimiento, por lo general, la mayoría de las personas entran en está fase alguna vez.
Aquí surgen las ideas de emprendimiento, lo que podría hacer para dejar mi trabajo y montar mi propio negocio, normalmente, pasan muchas ideas, todas tan improbables.
Algunas veces imaginamos como empezar y las cosas que nos harían falta para poder ejecutar, la que creemos que sería una gran idea de negocio.
Pero así como la mayoría de las personas entran en está fase también es común que nos quedemos en está fase y no pasemos a la acción.
Acción
La idea deja de ser una idea y se convierte en un proyecto. Se planean los recursos necesarios para poner en marcha el emprendimiento y se busca la financiación.
Independientemente de la idea, el proceso de acción puede ser muy variable dependiendo del conocimiento que tengamos, tanto de como emprender como del negocio que planeamos emprender.
Es decir, que dependiendo del conocimiento y la experiencia este proceso resulta más o menos complejo para el emprendedor.
Los emprendedores con experiencia usan herramientas, estudios de mercado, un plan de acción, definen un modelo de negocio y planifican los recursos y fases de ejecución.
Los emprendedores novatos sencillamente nos lanzamos con poco conocimiento del tema y con aquellos elementos que creemos podrían funcionar en un mercado que resulta desconocido.
Cohesión
En está fase se empiezan a unir las partes del proceso de concepción y acción, es decir, es donde empezamos a ver los resultados de nuestro trabajo.
Está es sin duda la fase clave en el camino del emprendedor y donde la mayoría de los emprendimientos fracasan.
Cohesión implica unir diferentes estrategias para lograr que nuestro negocio no fracase.
Es necesario, integrar diferentes elementos de marketing y gestión empresarial que nos permita llevar nuestro negocio a la siguiente fase.
Los emprendimientos que fracasan, muchas veces no han hecho lo suficiente o han incorporado elementos incorrectos en su estrategia y no han logrado corregir el curso.
Los emprendedores novatos esperan en está fase empezar a percibir ganancias de su trabajo, pero esto puede tardar más de 6 meses o incluso años sin que el negocio logre un punto de equilibrio.
Expansión
Cuando el emprendimiento llega a un punto de equilibrio y las ganancias empiezan a retornar a la empresa, es donde se da la fase de expansión.
El negocio empieza a crecer y el emprendedor con ella. Dependiendo del modelo de negocio, un emprendimiento puede o no ser rápidamente escalable.
Aquí también se empiezan a percibir las ganancias residuales del negocio y el resultado de esfuerzo del emprendedor.
No obstante, para llegar a este punto se requieren varios años de trabajo y dedicación.
Sin lugar a dudas, las personas con pobre mentalidad emprendedora no logran llegar a este punto de expansión, pues la ansiedad y la motivación inicial terminan desapareciendo.
¿Camino de errores?
Cuando decidí emprender tenia nociones que sería un camino difícil pero jamás espere que fuera a ponerme a prueba todo el tiempo.
No es algo sencillo salir de la zona de confort de un trabajo para enfrentarse al estrés y el arduo trabajo que implica emprender.
Claro si has decidido emprender por la razón correcta seguramente sentirás una gran satisfacción en cada paso que das.
Es algo muy común equivocarnos y cometer errores en el camino del emprendedor. Lo realmente importante está en aprender de los errores y lograr ajustar las estrategias para superar las dificultades.
Mi recomendación si quieres emprender es que lo hagas con un propósito más allá de querer ser tu propio jefe o con el afán de generar más ingresos.
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