La productividad depende en gran medida de esas pequeñas cosas que están programas en nuestro quehacer diario. Esas cosas que hacemos de forma habitual y que son perfectamente modificables. Has de saber que, nuestros hábitos determinar nuestro ser y hacer. Es los que nos permite crecer o estancarnos en el día.

Desde la adicción al correo electrónico, las redes sociales, la mala organización, el caos del trabajo entre reuniones o completar tareas atrasadas. Estamos en un nuevo año y es hora de desprenderse de esos malos hábitos que retrasan nuestra productividad. Es hora de comprometerse con los secretos de la productividad y mejorar constantemente.

En nuestra vida acumulamos constantemente hábitos algunos buenos otros no tan buenos, y es que los hábitos los encontramos en todo nuestro quehacer. Siempre nos dicen de los hábitos buenos en el trabajo, pero, ¿cuáles son los hábitos que tenemos que evitar? Eso es precisamente de lo que trataremos hoy, de esos hábitos que debemos desechar y que nos hace improductivos.

Disculparse

¿Cómo así? ¿Disculparse es un mal hábito? Si considera el hecho que hay personas que viven disculpándose por cualquier cosa, incluso sin haber cometido algún error, pues sí. A menos que haya cometido un error deliberadamente, no hay necesidad de disculparse porque algo del trabajo no ha salida como se esperaba. Debe tener en cuenta que no todo está bajo su control y que los accidentes ocurren. No pretenda cargarse culpas por problemas que salen de su control, o bien por errores que alguien más cometió.

Por otro lado, es más productivo intentar solucionar el problema y aprender de los errores, en lugar de pedir disculpas sin hacer nada. Esto no solo habla de su liderazgo y su fuerza, sino que ayuda a mantener la confianza. Pues si algo saliera mal en el futuro, tendría la capacidad de solucionarlo.

Decir Sí a todo

Uno de los grandes secretos de la productividad es aprender a decir No. Decir Si a todo lo que nos solicitan, solo le traerá más trabajo y se sentirá saturado física o mentalmente. En lugar de asumir varias tareas y esforzarse más de lo que permite su capacidad, aprenda a decir No, cuando considere que el trabajo es excesivo para usted.

Los grandes líderes conocen la importancia de este enfoque. Por esta razón se concentran en una tarea hasta terminarla y priorizan las necesidades, lo que permite ser más productivo.

Puntualidad

Este no solo es un hábito, sino un valor que se debe cultivar. Llegar tarde deja un mensaje a usted y a sus colegas muy cuestionable. Puede ser incluso considerado como una falta al respeto o que no valora lo suficiente los intereses de sus colegas y los propios.

Además, ser puntual implica tener más tiempo para hacer las cosas que tiene programadas. Puede ayudarse con herramientas para mejorar la productividad, tener mayor control de sus tareas y de sus actividades.

Confiar en los datos

Hoy en día abundan los datos y tenemos la máxima disponibilidad de los mismos en el momento que se requieran. Pero a veces los datos solamente son una guía inexacta, y nos olvidamos de seguir la intuición. Nos cegamos a los datos y perdemos de vista grandes oportunidades que están justo frente a nuestros ojos.

Los datos deben ser un apoyo en nuestro trabajo, pero no deben marcar nuestras decisiones. No hay que olvidar analizar los datos propios y emplearlos en 2018.

Obsesión por la competencia

Este es un factor importante en los negocios que no quede duda. Pero lo más importante no debe ser lo que hacen otros, sino como estamos mejorando nosotros mismos. Si te fijas en lo que hacen los otros siempre estarás detrás de la competencia.

En lugar de estar analizando la competencia, gastando tiempo y esfuerzos, lo mejor sería preocuparse por ser diferente. Por establecer una estrategia que rompa los esquemas y que diferencie el negocio frente a la competencia.

Estar siempre conectado

Smartphone, portátil, tablet, computador de escritorio entre otros dispositivos, no ha vuelto esclavos. Analice cuanto tiempo pasa al lado de un dispositivo conectado a internet, puede ser leyendo correos o revisando las redes.

Haga lo posible por tomar descansos tecnológicos durante el día. Limite el número de horas que interactúa con sus dispositivos. Esto mejora su trabajo creativo y el dinamismo en la resolución de problemas complejos.

Comience el día con una actividad estimulante

Antes de entrar en su trabajo y en la resolución de los problemas de su empresa. Tome el tiempo para realizar una actividad estimulante, que no esté asociado a su trabajo.

En la mañana el cerebro esta descansado, fresco y listo para abordar problemas complejos. Pero también es más receptivo, si estimula su creatividad en la mañana, la fortalecerá para resolver los problemas del día.

Jugar a lo seguro

Tal vez parezca una medida razonable, sin embargo, el ritmo de la innovación es acelerado, y los cambios llegan rápidamente. Por esta razón, no es adecuado quedarse quieto en un mercado de constante movimiento. Si su estrategia es jugar seguro, intente moverse con pequeñas inversiones de bajo riesgo.

Independientemente de su área de trabajo, busque la manera de ser más dinámico, encuentre la manera de llevar su negocio en el camino de la innovación, conservando un riesgo razonable para usted.

Evitar los dispositivos en reuniones

Tanto en reuniones personales como en reuniones de trabajo, es prudente eliminar el uso de los dispositivos móviles. Incluso sin están en silencio y boca abajo, estos siguen desviando la atención suya y de su equipo de trabajo, distrayéndolos de la tarea que están realizando.

Disponga de un lugar donde dejar los teléfonos para ayudar a controlar este tipo de comportamientos. Verá que la productividad y la creatividad mejorarán, disminuyendo la ansiedad por estar revisando los celulares.

Trabajar solo

Incluso si es el único empleado de su empresa, es necesario que encuentre la forma de fomentar el trabajo colaborativo y crear una red de trabajo. Emprender o administrar un negocio no es una tarea fácil, ni es correcto afrontar las dificultades sin ningún apoyo.

Cuanto se trabaja en solitario los problemas tienden a parecer insuperables y se sentirá tenso. El trabajo en solitario durante mucho tiempo tienen a ser improductivo, la creatividad disminuye y es menos clara la toma de decisiones.

Si alguno de estos hábitos rige su vida, es momento de limpiar las malas costumbres y empezar en año nuevo con el pie derecho.